Eligiendo un tema de investigación

Sin duda, elegir un tema de investigación es algo complicado. En el post de hoy platicamos sobre cuatro reglas básicas que pueden ayudarnos en esta parte del trabajo. 

Una de las partes más difíciles a la hora de realizar un proyecto de investigación, sin duda, es elegir qué voy a investigar. Y es que sin importar la disciplina en la que nos desempeñemos, la cantidad de temas posibles a estudiar multiplicados por las diversas maneras de abordarlo, son prácticamente infinitas.

Nunca pensemos que "ya está dicho todo" y que esa investigación no tendrá futuro. Si bien podemos toparnos con temas muy trabajados, siempre podemos realizar nuevas preguntas y llegar con nuevos enfoques, pues somos personas muy diferentes a las que anteriormente lo estudiaron y podemos tener unas incógnitas completamente distintas.

Sin embargo, también hay que considerar las llamadas 4 REGLAS OBVIAS para la elección de nuestro tema, las cuales no podemos ignorar y que sin dudas nos ahorrarán muchos dolores de cabeza.

1. Que sea un tema de nuestro agrado. Si bien como estudiantes es más fácil de cumplir esta regla, ya que a la hora de ser profesionistas, muchas veces estamos limitados por las directrices de la institución para la que trabajamos, aunque siempre podemos darle un giro o enfoque nuevo al tema para hacerlo de nuestro interés. Es importante esta regla, ya que si el tema no nos gusta, difícilmente lo haremos bien.
2. Que las fuentes sean accesibles. Si vives en la ciudad de San Francisco de Campeche, pero quieres hacer una monografía histórica sobre Tombuctú, adelante, lo puedes hacer, pero créeme que las fuentes para tu trabajo serán muy difíciles de conseguir, especialmente si eres un estudiante. Lo mejor es empezar con lo más cercano, aquello que sabes que puedes encontrar en el lugar donde vives.
3. Que las fuentes sean manejables. Si bien puedes tener bien identificadas las fuentes, en ocasiones el acceso a ellas no es tan sencillo, porque no tenemos el nivel "requerido" por ser simples estudiantes de bachillerato o porque no sabemos cómo manipularlas, y esto es algo muy importante. A veces los historiadores, por ejemplo, no respetan las normas de manejo de fuentes antiguas como periódicos o archivos como son el uso de guantes y cubrebocas, y eso puede traer muchos problemas de salud más adelante. Ahora imagina si un químico o biólogo tampoco respeta sus normas de manejo, la cosa sería mucho peor.
4. Que el marco teórico sea acorde a nuestro nivel de conocimiento. Esta regla es sobre todo para los estudiantes. A veces uno quiere comerse el mundo de un solo bocado, sin embargo, hay que ser conscientes de que la educación se encuentra por niveles, por lo que no podemos construir un marco teórico acorde a un nivel de doctorado si solo estamos en la escuela preparatoria. Eso no justifica que entreguemos trabajos de mala calidad, pues se aplica también a la inversa, si estudiamos el bachillerato no vamos a realizar trabajos que parezcan de un niño de primaria. Siempre a nuestro nivel y siempre de calidad.

Estas cuatro reglas nos deben de servir para poder decir si el tema que queremos trabajar es correcto o no. Al menos si las cumplimos, podemos saber que el trabajo será mucho más sencillo.

¿Estás de acuerdo con ellas? ¿Qué otra regla añadirías? Cuenta tu experiencia trabajando investigaciones.